Monsieur Privé en front row VIP posando a la espera del inicio
del desfile de Andrea Ayala.
Xavier Zazo y Clara Brull, conocidos exponentes del diseño de vanguardia catalán, fueron los encargados de abrir esta nueva edición de la 080 Barcelona Fashion Week. Tras el título “Bushido” nombre que recibía el camino a seguir en el orden del samurai, las modelos divididas en tres salidas desfilaron elegantemente al unísono. Una espectacular Marina Pérez ataviada con un sublime vestido azul eléctrico abrió el maravilloso desfile. Vestidos laboriosamente tratados evocaban a las nobles armaduras que protegían el cuerpo de los samuráis. Pliegues de seda, fruncidos de gasa y filigranas de satén fueron algunos de los elementos ornamentales que dotaron de magnificencia y solemnidad a laboriosas prendas en su gran mayoría. Elegantes cuellos construidos a modo de origami conjugados con escotes en pico se difuminaban en volátiles drapeados que al mismo tiempo morían construyendo nuevos volúmenes. El azul dio paso a su complementario, y elegantes guerreras ataviadas de rojo fuego se lanzaron al campo de batalla para disputar un duelo que cesó al aparecer en escena blancas damas encarnando la luz de la esperanza, una luz cuyo brillo apagó una impresionante Irina Lanzeranu luciendo un nuevo look muy garçon, ataviada con un elegante outfit de dos piezas en color negro que emulaba a una dura armadura samurai.