En el desfile de Boris Bidjani Saberi también Monsieur Privé dejó huella, y quedó constancia de su presencia in front row. Fue un desfile con reminiscencias mortuorias pero no por ello menos elegantes, donde el protagonismo de la presentación recaía en la confección artesanal de algunos de los tejidos presentados. Un bonito cierre sin lugar a dudas con una carretilla repleta de elegantes esferas talladas de cristal de Swarosky que sin lugar a duda supieron plasmar la magnificencia de la metáfora visual del momento. Monsier Privé tuvo el honor de ser agraciado regalándole el personal del diseñador una de estas codiciadas y preciosas bola de cristal tallado que salió de orbita maltrechamente durante el cierre del desfile.