--
Ocaña es uno de esos apellidos que pese a su arraigada etimología peninsular, durante años ha formado parte del santoral de la noche barcelonesa. Su estrátegico emplazamiento lo ha convertido involuntariamente en testigo de la evolución y el desarrollo de una ciudad viva y latente como Barcelona y en todo un referente internacional, aún hasta día de hoy, asociado a la acepción de la faceta más canalla y auténtica de la capital catalana.
Lo que en su día abriese sus puertas como un negocio promovido por una inquietud de juventud, con el paso de los años, sabiendo mantener intactos los pilares de su esencia sin dejar de lado las modas y gustos de cada época, se ha convertido en un clásico atemporal y en un acierto seguro en cuanto a ocio y gastronomía de calidad se refiere. Lejos de convertirse en una mera atracción turística, apuestan por reconquistar los corazones del público local, invitándoles a disfrutar de su oferta.
---
En esta nueva etapa Manel Jiménez es el encargado de llevar las riendas de su cocina como chef ejecutivo, ofreciendo una carta basada en un producto próximo y de calidad con claras influencias francesas, toques libaneses y ese equilibrio que siempre ha caracterizado a la dieta mediterránea.
Prueba de ello son el foie gras mi cuit con ensalada de hojas y granolo con vinagreta de remolacha, el tartar de ternera ecológica del Pirineo con huevo de Mollet o la coca de jamón ibérico con berros y burrata.
De su presentación destacar que todos y cada uno de los platos son servidos en vajillas de porcelana de Limoges autenticas de principios de siglo.
El empedrat de atún rojo con lenteja beluga, jengibre y sésamo destaca por el exotismo de sus ingredientes y sorprende por la armoniosa relación entre los mismos. El baba ganoush / mutabal de berenjena se convierte en un suave velo aterciopelado al entrar en contacto con nuestro paladar desde el primer bocado. Los más golosos podrán saciar su gula saboreando deliciosos postres de los que destacaremos el pan con aceite y chocolate y las fresas compotadas con helado de nata.
Añadir que si queréis vivir una experiencia mucho más completa podréis enriquecerla los domingos por la tarde al ritmo de una banda de música que actuará en directo cada semana a modo de broche de oro con el que despedir con alegría la semana.
--
