Monsieur Privé en la presentación de Obac y Kyrie las dos nuevas fragancias de Almah Parfums 1948

El pasado jueves 16 de noviembre, la legendaria firma de alta perfumería española Almah Parfums 1948 presentó en el Hotel Àbac de Barcelona dos nuevas referencias inspiradas en dos de los vinos más reconocidos de las laureadas Bodegas Clos de l’Obac. De la mano de Jordi Magrans actual perfumista de Almah Parfums y de Guillem Pastrana director de Clos de l’Obac, nos adentramos en un sorprendente viaje a través de los sentidos, mediante una armonización sin precedentes donde aromas y matices cabalgan al unísono hacía la sublimación de los sentidos. Almah Kyrie y Almah Obac nacen inspirados en las notas que desprenden cada uno de los vinos homónimos de Bodegas Clos de l’Obac y en la atmósfera que los rodea durante todo su proceso de elaboración. 

Almah Parfums fue fundada en el año 1900. Décadas más tarde, en los años treinta, un devastador incendio acabó con la fábrica. Fue en 1948 cuando, con esfuerzo y sacrificio la tercera generación decidió reemprender el negocio hasta día de hoy, contando con 72 referencias.  Como el “Ave Fénix” resurgió de sus cenizas convirtiéndose en todo un referente internacional de alta perfumería de autor, asociada al lujo, la vanguardia y la calidad. Clos de l’Obac fue fundada en 1989 por la familia Pastrana Jarque. Cuentan con tres referencias de prestigio y renombre internacional con D.O Priorat. Miserere, Kyrie y Obac. Compartiendo la lucha, la constancia, el esfuerzo y la superación como pilares principales de ambas filosofías de empresa, el éxito está más que garantizado. Dos productos afines y evocadores con historias únicas detrás.  

Según Guillem Pastrana “Kyrie es un blanco envejecido dentro de una bota de roble francés y posee una estructura compleja de exquisita finura. Obac por su parte es un tinto potente, extraordinario y complejo gracias a la variedad de sus cepas”. Bajo estas premisas Jordi Magrans comenzó a perfilar los esbozos de las primeras pirámides olfativas. A cada nota decidió asociarle una sensación y a cada matiz un recuerdo, de ese modo capturo la más pura esencia de cada uno de ellos. Almah Kyrie es elegante, dulce, sensual y desprende un aura de feminidad atemporal. Entre sus ingredientes destaca la rosa búlgara, el cardamomo, el almizcle egipcio y jazmín sambac. Almah Obac es claramente masculino, su cedro del Himalaya lo delata junto con el clavo, la pimienta negra, la mirra, la madera y el tabaco que emana durante su evolución.

El resultado salta a la vista, dos obras maestras de la alta perfumería contemporánea que rinden homenaje a dos de los tres vinos más codiciados del Priorato. Destacar que ambas empresas están comprometidas con el medio ambiente y obtienen sus materias primeras de manera respetable y sostenible. Los envases de los perfumes están fabricados con cristal reciclado, las etiquetas son de papel orgánico y los tapones son de madera de roble envejecido. Sus cajas recuerdan a los antiguos joyeros de viaje, están realizados en cuero florentino y están forrados en suave terciopelo. El cliente de estos perfumes es entusiasta, culto y amante del arte. Valora la artesanía como algo único. Siente curiosidad y vive la cultura del perfume del mismo modo que la del vino.

Si buscáis la exclusividad y la distinción sin etiquetas, Almah Parfums será vuestra elección estas Navidades.