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Monsieur Privé en el Bluesman Cinema Bar del Hotel El Palace Barcelona (Del 28/01 al 25/02)

El emblemático Hotel El Palace de Barcelona, históricamente también conocido como El Ritz, construido en 1919 por el célebre arquitecto catalán Eduard Ferrés en el 668 de la céntrica y bulliciosa Gran Vía de las Cortes Catalanas,  completa su oferta de servicios con unas originales sobremesas de cine dominical en “The Bluesman Bar”, un speak easy con cigar lounge privado y actuaciones en directo, situado en la planta baja del establecimiento que cada domingo, hasta el próximo 25 de febrero, abrirá de par en par sus puertas para dar la bienvenida a todos aquellos que quieran disfrutar de una tranquila tarde de cine en un escenario de excepcional singularidad.

Cada sesión dará puntualmente comienzo a las 17:00h. Entre los títulos proyectados, los espectadores han podido disfrutar de clásicos contemporáneos de reconocido prestigio y renombre internacional (En su versión original, subtitulada en español) de la talla “A Star is Born”, “Call me by Your Name” y próximamente “Pride and Prejudice” (11 de Febrero), “Roman Hollidays” (18 de Febrero) o ”The Bridges of Madison Country” (25 de Febrero). Por motivos de aforo, para poder acceder es necesario realizar reserva con un mínimo de 24 horas de antelación. Existen dos tipos  de asientos, en mesa con taburetes altos o en mesa con butacas bajas. Ambas opciones incluyen dos cócteles y dos raciones de palomitas (Servicio para 2 personas).

Monsieur Privé en el nuevo Restaurante Winter Garden del exclusivo Hotel El Palace de Barcelona

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Desde hace poco más de un año el chef Marc Mallasén asumió las riendas del Hotel El Palace de Barcelona como asesor gastronómico del mismo. Su genialidad y pasión por la cocina le han llevado a desarrollar un estilo de cocina propio e inconfundible con el que deleitar a los paladares más exigentes. Tras reformar y reversionar la oferta existente, su maestría y excelente saber hacer le han permitido reinterpretar, sin ningún problema, las principales señas de identidad del hotel, bajo los filtros de los códigos de su filosofía.

Prueba de su éxito es el Winter Garden, el restaurante que corona la última planta del edificio y preside la majestuosa terraza de más 1500 metros cuadrados que lo envuelve. Un viaje atrás en el tiempo donde el comensal se sumerge de pleno, viviendo en primera persona, el esplendor y la gloria de una época pretérita, ajena a la cotidianidad de nuestro día a día que en la mayor parte de lo posible, recupera el mobiliario original de principios de siglo y recurre a la vegetación autóctona de la zona para recrear una atmósfera tranquila y elegante.  
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Luminoso y diáfano, el Winter Garden se abre al público como un restaurante de alta cocina con una completa oferta gastronómica que engloba gustos y costumbres de todo tipo de culturas y comunidades, inspirándose en la típica cocina catalana. Un acierto seguro que gusta a partes iguales tanto a niños como a mayores.

Su cálida atmósfera es reforzada por una decoración de época compuesta por un mobiliario de mimbre y bambú que envuelto en suaves manteles de lino y elegantemente decorado con cubiertos y menaje de plata inglesa y una vajilla diseñada por Christian Lacroix para Vista Alegre, invitan al comensal a revivir la magia que desprende el acuñar la más pura acepción del lujo.

Sus paredes y techos, enmarcados por una celosía entramada de madera, configuran un espacio presidido por un impresionante fresco cuyo punto de fuga acentúa la sensación de profundidad del espacio, creando un efecto óptico a modo de trampantojo donde se integra a la perfección la realidad del lugar con la ficción utópica ideal representada. Un juego de espejos enmarcados con pan de oro se encargan de hacer el resto, reflejando el exterior en el interior, haciendo creer al comensal que se encuentra en un punto en suspensión en tierra de nadie.
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Su amplía y variada carta se complementa con un menú ejecutivo de medio día donde se da elegir entre cuatro entrantes, cuatro platos principales y tres postres con copa de vino, agua y café incluidos. La fórmula perfecta para sorprender a nuestros acompañantes un día de cada día sin la necesidad de recurrir a ninguna fecha especial como excusa para celebrar lo bella que es la vida.

Como entrante somos sorprendidos con un ravioli de setas de temporada con crema ligera de parmesano y shimejis confitados. No hay palabras para describir el cúmulo de sensaciones que se abren paso en el paladar tras el primer bocado. Su relleno se deshace sólo en la boca y su intensa salsa de parmesano embriaga nuestros cinco sentidos, potenciando aún más el sabor de la carne que matizan las setas. No dudéis en pedir una ración de pan recién hecho con mantequilla artesanal, incluido en el menú, con el que disfrutar aún más de vuestra experiencia.

De la selección de platos principales elegimos el arroz de rostit con botiffarra, costilla de cordero, mantequilla y parmesano (Una ración más que generosa con la que saciar la más temible de las gulas. De su presentación destaca la armonía de color reinante entre los ingredientes utilizados. Yendo más allá podría recordar a la tierra recién labrada) y la merluza asada con salsa verde, espárragos y huevo duro todo un poema visual donde el color de la esperanza lo cubre todo con su manto dando paso a un nuevo universo de sensaciones.

Siendo incapaz de decidirme tan sólo por uno de los postres, me pedí dos, dando comienzo con el éclair de chocolate con avellana, crumble y crema de helado de chocolate blanco. La esponjosidad del pequeño relámpago es atenuada por una suave y dulce crema de avellana decorada con flor de pensamiento que le otorga un toque de color sensual y voluptuoso. La crema de helado contrasta en yuxtaposición con el crumble dando como resultado un interesante juego de texturas.
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Di la orden de que mi próximo postre fuera servido junto con el té durante la sobremesa. Como segunda opción me decanté por una tarta de crema de limón con merengue, crumble y gel de yuzu. Su presentación, en consonancia con la del éclair, presentaba un paleta cromática similar donde con acierto, otros ingredientes recrean paralelamente los mismos colores.

De la carta de infusiones elegí un poleo menta con hielo, servido en una preciosa taza diseñada por Christian Lacroix para Vista Alegre, poniendo de este modo el broche de oro a una fantástica sobremesa repleta de risas, confidencias y reencuentros inesperados.

Desde Monsieur Privé queremos felicitar a todo el equipo de Marc Mallasén por el maravilloso trato recibido y a él por dejarnos formar parte de su maravilloso universo.  
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Monsieur Privé en la exclusiva Suite Arte del pintor Salvador Dalí del Hotel El Palace de Barcelona

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La figura institucional de un hotel gran lujo de la categoría de El Palace de Barcelona siempre se ha vinculado directamente con el esplendor y la gloría de la ciudad donde abrió sus puertas. Símbolos de poder, progreso y bonanza económica, representan una exitosa fórmula de negocio con la que convertir cualquier destino en un referente del que poder sentirse orgulloso bajo cualquier contexto. Prueba de ello es la confianza ciega que depositan ilustres personalidades cuando se alojan en sus habitaciones de ensueño o dan vida a sus salones.

Casi un siglo de historia da para mucho y pocos hoteles de la Ciudad Condal pueden hacerse eco de haber recibido a algunas de las figuras más emblemáticas de cada época. Fuentes históricas afirman que algunos como llegaron, se fueron y que otros sin embargo, dejaron huella. Uno de los huéspedes más queridos fue el pintor catalán Salvador Dalí, padre del surrealismo y una de los máximos representes de la historia del arte dentro del ámbito de la pintura contemporánea. Cada vez que hacía una reserva se le esperaba con ilusión, ya que con su carácter afable y excéntrico, inundaba de vida el hotel, contagiando a todos con su inagotable alegría. Como premio a su fidelidad, en la planta noble la dirección habilitó una completa suite de más de 150 metros cuadrados, bautizada con su nombre y que durante años pasaría a la posteridad como la presidencial del complejo.   
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Casi a punto de cumplir cien años, nos alojamos en la renovada Suite Arte Salvador Dalí para vivir en primera persona la magia de sentirnos celebrity por un día.

La habitación cuenta con tres accesos que desde los enmoquetados pasillos que enmarcan el perímetro del hotel pasan completamente inadvertidos a ojos de terceros, asegurando de este modo la privacidad del huésped.

Accediendo por la puerta principal se llega a través de un recibidor, que a modo de ante sala, comunica el pasillo con un completo salón comedor, con capacidad para ocho comensales y decorado al más puro estilo clásico con mobiliario original de la época, presidido por un retrato del artista. Del espacio llaman inusitadamente la atención las lámparas art decó en forma de palmera que cuelgan de los techos. Piezas únicas e irreemplazables de incalculable valor que compiten en belleza pero en perfecta armonía con sillones estilo Louis XIV, adamascados dieciochescos, una chimenea de mármol de principios de siglo y cornisas de pan de oro. A la derecha se encuentra una habitación doble de invitados completamente equipada y con baño romano propio. A la izquierda la primera puerta conduce a un pequeño baño de cortesía y la segunda a la majestuosa habitación principal, un onírico espacio donde el tiempo se detiene y la más pura acepción del lujo cobra más fuerza que nunca. Nada más llegar es inevitable no despertar al niño travieso que llevamos dentro dormido, tirándonos a la cama con dosel de madera de caoba que preside la estancia. Acostumbrados y seducidos por la elegancia del ambiente, regresamos al presente con pantallas de plasma camufladas detrás de los espejos que coronan las chimeneas, un sabio ejercicio de buen gusto y excelente saber hacer donde tradición y vanguardia van de la mano ofreciendo todo tipo de comodidades.
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El cuarto de baño data de 1919 y cuenta con una bañera de estilo romano recubierta de pequeñas piezas cerámicas que a modo de mosaico forman figuras geométricas de temática marina, otra bañera tipo jacuzzi y un completo tocador al que se accede desde un gran vestidor que comunica la habitación con el baño y el pasillo.

Cuidando hasta el más pequeño detalle, nada queda al azar, prueba de ello es la selección de amenities de la prestigiosa firma joyera Chopard que complementan la oferta. En una de las mesas auxiliares del salón, nos llama la atención una fotografía enmarcada donde aparece Salvador Dalí junto a dos modelos estiradas en la bañera y cubiertas de un sinfín de piezas de alta joyería. Un testimonio clave de las muchas excentricidades que protagonizó el artista en su suite.

Durante el desayuno nos cuentan que aquello no fue nada comparado con el día que organizó una fiesta sorpresa a su esposa Gala en la que le regaló un caballo blanco disecado a tamaño natural que hizo subir por la escalinata del hotel, tirado por cuatro operarios. Todo un despropósito para la época que quedó reflejado para la posteridad por los numerosos medios de comunicación allí presentes que se hicieron eco de ello.

Llegadas las doce del medio día, cual Cenicienta antes de sonar la última campanada de media noche y romperse el hechizo, nos dirigimos al front desk de la entrada para hacer check out y despedirnos personalmente de todo el equipo, dándoles las gracias por todo.
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Monsieur Privé en un cóctel de primavera celebrado en el Hotel Palace de Barcelona.

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Durante décadas el Hotel Palace de Barcelona ha sido testigo de un sinfín de momentos históricos, desde que en 1919 bajo el paraguas empresarial del imperio hotelero de César Ritz, abriera por primera vez sus puertas. Situado en la confluencia de la bulliciosa Gran Vía con Roger de Llúria, su fachada de estilo neoclásico enmarca con un aura de lujo y solemnidad el chaflán que ocupa. Sus toldos carmesí y el dorado que recubre parte de sus preciosistas forjados, dan la bienvenida al transeúnte, invitándole a adentrarse a un mundo donde el tiempo se detiene, dándole la oportunidad de revivir el esplendor y la gloría de una época pretérita que convive en armonía con el presente, mirando siempre hacia el futuro.

Aún recuerdo la primera vez que traspasé su puerta giratoria mientras su amable portero me daba la bienvenida y mis sentidos se embriagaban con un fresco y sutil aroma a fresias, caminando en dirección al Nineteen, su hall bar, mientras poco a poco sentía como ya formaba parte de su historia.

(Bodegón compuesto por la invitación que me hizo llegar el gabinete de comunicación del Hotel Palace y algunas imágenes del transcurso del evento.)
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Invitado por El Palace y su maravilloso y profesional gabinete de comunicación, el pasado jueves tuve la oportunidad de reencontrarme inusitadamente con personas excepcionales que hacía tiempo no veía como a mi adorada Montse Martínez de Glow Active Detox Collagen de Eiralabs, con quien muy gustosamente entré del brazo mientras intercambiamos risas y confidencias, mi querida Laure Pelloux, a quien conocí hace años durante mi ejercicio como relaciones públicas de la Embajada de Indonesia en Barcelona, comentándome que es ahora responsable de markéting de Lladró, la simpatiquísima Vinyet Almirall, directora de comunicación de Bodegas Torres en compañía de su encantadora relaciones públicas Marta Bonell, siendo siempre un placer reencontrarme con ella desde que en mi época como ejecutivo de cuentas en Grey Group fueron clientes nuestros, asegurándose en todo momento de que no faltase ni Viña Esmeralda ni rosado en las copas de los invitados, presentándome a la encantadora Maria Núñez García-Adámez de Jacoliva, mi dulce Ekaterina, directora creativa de la firma de complementos Saviler en compañía de su esposo Sergi Balcells, director de Job Today en Cataluña, el prestigioso cirujano plástico Javier de Benito en compañía de su adorable hija Carlota, con quienes tuve el placer de compartir velada durante el posterior cóctel, el alcalde emérito de Barcelona Xavier Trias, la modelo y miss mundo 2015 Mireia Lalaguna o el siempre amable y simpatiquísimo estilista Antonio Garrido
La copa de bienvenida fue servida en El Jardín de Diana, una preciosa terraza de estilo modernista cuyo nombre homenajea la deidad griega y figura corona la última planta del inmueble. Desde allí la oferta es infinita, desde disfrutar de una de las mejores panorámicas 365º de la Ciudad Condal hasta deleitar nuestro paladar con la amplía carta que ha elaborado Marc Mallasén para El Winter Garden, el restaurante de la terraza.
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En el centro, se encuentra una preciosa pérgola enmarcada por una frondosa vegetación típica de la zona y un restaurado mobiliario de hierro forjado. Allí se prepararon cócteles con base de ginebra, Vermut Yzaguirre de la mano del encantador Josep Fores Daura y refrescos. En uno de los laterales se sirvieron ostras, mientras en el otro se cortaba jamón para unos pocos afortunados. 
Dos horas más tarde, bajamos al Salón Gran Vía, la joya de la corona del hotel, una sala de 253 metros cuadrados con capacidad para 280 personas donde celebrar todo tipo de eventos y reuniones. Allí me presentaron a amabilísima y encantadora Elisenda Martí, la nueva directora de comunicación del hotel con quien compartí la mayor parte de la noche en compañía de otros periodistas, también invitados por el hotel, aunque el protagonista indiscutible de la velada no fue otro que Marc Mallasén quien no dudó en darlo todo y agasajarnos con un exclusivo cóctel, cortesía del hotel, elaborado para la ocasión donde pudieron saborearse deliciosos canapés de pan con tomate y jamón, bombones de chocolate blanco con foie, viera infusionada con té rojo, falsos makis de ensalada césar, esferificaciones de ajo blanco con crujiente de cecina, gazpacho de remolacha o espuma de coco con foie, todo ello maridado con una excelente selección de vinos por cortesía de Bodegas Torres.

Desde aquí quiero dar las gracias al Hotel Palace y a su fantástico gabinete de comunicación por la invitación y tenerme siempre presente, a Bodegas Torres por asegurarse de que no faltase vino en mi copa durante toda la noche y a Marc Mallasén junto con su equipo por el suculento cóctel que regaló a nuestros sentidos. 

Monsieur Privé en la inauguración del nuevo y exclusivo club de fumadores del Bluesman Cocktail Bar del Hotel Palace de Barcelona (Gran Vía 668)

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Desde hace ya algunos años el Hotel Palace de Barcelona (Antiguo Ritz) se ha convertido en el escenario de un sinfín de maravillosos episodios de mi vida, tanto en el plano personal como el profesional.  Mis frecuentes visitas me han ayudado a hacer mío el espacio, permitiéndome conocerlo en profundidad como si de la palma de mi mano se tratase, hasta el punto de llegar a descubrir alguno de los muchos secretos que se ocultan tras las marqueterías y adamascados de sus muros.

Nada más traspasar la puerta giratoria que preside el hall de la entrada, su atmósfera te atrapa dándote la bienvenida y trasladándote a una época pretérita de esplendor y gloria, difícil de ubicar en el tiempo, ya que los relojes se detienen y todo adquiere una nueva dimensión.
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En esta ocasión invitado por su nuevo director, el Sr. Jaume Donjó, tuve la oportunidad de descubrir  un nuevo espacio, recién inaugurado y hasta aquel momento aún permanecía cerrado al público, me refiero al nuevo club de fumadores del Bluesman Cocktail Bar, una sala donde los amantes de las tradiciones podrán disfrutar de un buen puro mientras saborean uno de los mejores whiskys del mundo al ritmo de la música de la banda de jazz que actúe ese día.

Resulta difícil de creer, verdad? En una sociedad como la nuestra donde imperan las prisas, es de agradecer que se abran nuevos espacios donde poder disfrutar de nuestro tiempo como mejor nos plazca y acuñando a su vez todas y cada una de las acepciones más representativas del hedonismo.

Emplazado en el lugar que en su día fuese la carbonera del hotel y décadas más tarde el refugio de artistas e intelectuales de la época, hoy recobra su esplendor transformándose en un nuevo espacio cuya elegante estética cabalga entre la más pura esencia de la Belle Epoque y el refinamiento más exquisito de nuestros días.

Con estricta puntualidad, uno a uno fuimos llegando todos y cada uno de los invitados, llenándose poco a poco la sala con ilustres personalidades del ámbito de la comunicación en Barcelona.
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La cena-cóctel con la que nos agasajó Marc Mallasén, asesor gastronómico y chef titular del hotel, estuvo compuesta por un sinfín de delicias de las que quiero destacar su mini hamburguesas de carne de buey, sus patatas bravas con trío de salsas, sus dados de rabo de toro y sus esferificaciones de Dom Pérignom con caviar. Todo un festín para los amantes de la alta cocina cuyo dulce broche de oro fue puesto por unos mini tiramisús con falsa tierra de chocolate servidos en pequeños tiestos de terracota, tan bonitos que hasta daba pena comérselos.

La espera entre plato y plato fue maridada libremente con una selección de la extensa carta de cócteles de la que disponen. En mi caso me decanté por los clásicos, no yéndome de allí sin probar su piña colada, su cosmopolitan y su san francisco con flor de pensamiento.
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Durante el posterior baile mi gran amiga Laura Curt y yo emulamos a Karl Lagerfeld y su musa Cara Delavigne recreando un episodio del desfile métiers d’arts de Chanel celebrado días antes en los salones del Hotel Ritz de París.

Casi a las tres de la madrugada me dispuse a subir a la suite que días antes había reservado para aquella noche.  Tras ponerme cómodo me di un relajante baño en la bañera romana antes de caer rendido en la cama, no sin antes rememorar una y otra vez desde lo más profundo de mi corazón, todos y cada uno de los maravillosos instantes vividos aquella noche al ritmo de la canción Putting on the Ritz

Monsieur Privé en la presentación del libro Manual de Tejidos y Las Muestras de Maria del Carmen López Soler en el Hotel Palace de Barcelona (2016)

Al rememorar el esplendor pretérito de la moda catalana hay nombres clave como el de la escritora y consultora textil Maria del Carmen López Soler que aún a día de hoy resuenan en los círculos profesionales más reconocidos y elitistas del sector.

Toda una vida dedicada a la moda abala su trayectoria y excelente buen saber hacer convirtiéndola en toda una experta en la materia y pionera en la misma.

Explorando cada una de las facetas desde la que puede contemplarse esta industria, inició su periplo desde abajo en la prestigiosa casa de alta costura Santa Eulàlia, donde forjó las bases de un estilo propio que aún a día de hoy perdura y sigue vigente con más fuerza que nunca. Años más tarde se convirtió en una de las más solicitadas diseñadoras de genero de punto de Catalunya trabajando siempre para los mejores,  consolidando así su carrera como directora del área de moda, durante toda una década, en IDEP una de las escuelas de diseño más afamadas en aquel momento. Desde la sombra y siempre en un discreto segundo plano, ha asesorado a importantes directivos y formado a cientos de empleados que a día de hoy dirigen importantes compañías.

En la actualidad sigue más activa que nunca combinando sus inquietudes artísticas con la docencia e impartiendo clases formativas y conferencias en importantes empresas y en los centros de estudios más reconocidos de Barcelona

Citados en el céntrico y exclusivo Hotel Palace (Antiguo Ritz) asistimos a la presentación de su libro Manual de Tejidos - Las Muestras, una herramienta imprescindible para cualquier profesional, estudiante o apasionado de la moda que se precie. El Salón Cugat, un espacio dedicado al honor y la memoria del célebre compositor catalán fue el escenario elegido para presentar a un seleccionado número de medios de comunicación la tercera versión de esta guía única en su género. 
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Con estricta puntualidad y con el halo de magnificencia y solemnidad que ha caracterizado siempre a la alta costura, dio comienzo la presentación, una pequeña máster class introductoria y un posterior cóctel donde pudimos entrevistar y saber más sobre la autora de primera mano.

Ataviada con un vestido chaqueta vintage firmado por Pedro Rodríguez, uno de los diseñadores más afamados de la época dorada de la moda española, una entrañable sonrisa y una mirada llena de ilusión dio la bienvenida a los allí presentes agradeciendo su asistencia. 

Entre risas, confidencias y un sin fin de divertidas anécdotas transcurrió una provechosa tarde donde aprendimos un poco más sobre tejidos, esos grandes desconocidos que envuelven nuestro día a día.

Todo se remonta a 1989, bajo un contexto rico y prospero de bonanza económica donde Catalunya era uno de los principales fabricantes de tejidos de Europa. En vista que no había un termino medio con el que entablar un código de lenguaje básico estándar tanto a pie de calle como entre profesionales, dado que en aquella época aún se iba de un extremo a otro, a la alza empleando una terminología excesivamente técnica y especifica y a la baja con un lenguaje poco preciso y nada riguroso, decidió crear un término medio empleando una jerga que todo el mundo pudiera entender. Así fue como nació la primera versión de Manual de Tejidos, una guía única en el mercado aún a día de hoy donde poder consultar, tocar y analizar en vivo 217 muestras de tejido. Fue todo un éxito en ventas, no había taller de confección, fábrica de tejidos o escuela de formación que no tuviese un ejemplar en su biblioteca. 

En 2007 presentado en el lujoso Hotel Cotton House (La sede de la Casa del Algodón en aquel entonces) puso a la venta una nueva edición actualizada y revisada con algunas de las novedades más revolucionarias del mercado de aquel momento pero esta ocasión sin muestras, aunque con imágenes en alta resolución de las mismas, ya que fue concebido a modo de ampliación del primero añadiendo un temario anexo más técnico y especifico.

Tras el ferviente interés que suscita la moda en nuestra sociedad a día de hoy, tanto a nivel profesional como a estratos populares, el auge de las nuevas tecnologías y las ganas de aprender por parte de un nuevo consumidor sediento de saber, en 2014 comenzó de nuevo su andadura en búsqueda de tejidos con los que crear una nueva versión adaptada a nuestro tiempo. La crisis, el cierre de muchos fabricantes que participaron anteriormente, el traslado al extranjero de muchas fábricas y otros factores externos de índole socio-económicos redujeron de 217 a 116 muestras de este último volumen.. 

Adaptándose a la demanda del mercado actual y contando en esta ocasión con ilustraciones de Anna Miralles Monner, el lector podrá hacerse con un pack compuesto por un ejemplar de la segunda versión de Manual de Tejidos, concebido a modo de libro técnico de consulta, acompañado de un ejemplar anexo con 116 muestras reales. 

Tras un aplauso al unísono, respondió una rueda de ruegos y preguntas donde aclaró muchas de las dudas que asaltan por desconocimiento al consumidor a la hora de ir de compras, ya que son muchas las personas que desconocen la naturaleza o características básicas de los mismos. 

Para más información o adquirir un ejemplar en exclusiva: http://www.manualdetejidos.com/

(Imágenes cortesía de Pericles Manolopoulos y Monsieur Privé, Agenda modelo Toile Mongram de Louis Vuitton y pluma estilográfica modelo Starwalker de Montblanc)
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Los 13 mejores restaurantes de Barcelona donde dar la bienvenida al 2016 (Luxury Edition 15/16)

Quien más y quien menos llegadas estas fechas tiene un sin fin de múltiples e ineludibles compromisos navideños con un claro trasfondo gastronómico que les obliga a asistir y a estar presentes bajo ningún pretexto. 

Dando el pistoletazo de salida con las cenas de empresa, la Noche buena y la Navidad toman el relevo cediendo el testigo a la esperada cena de fin de año. Llegada esta fecha cada vez son más los que optan por cenar fuera de casa evitando así tener que cocinar y de ese modo escapar del despliegue logístico que para muchos supone el tener que cocinar para más personas. 

Con el fin de haceros esta noche mucho más fácil e inolvidable queremos sugeriros 12 de los mejores restaurantes de Barcelona donde podréis vivir una velada mágica y de ensueño en un día tan señalado junto a vuestra pareja, amigos o seres queridos. 

En el número uno de nuestro ranking queremos posicionar al Restaurante Caelis como la mejor opción para despedir el año por todo lo alto y bajo un marco incomparable de lujo y solemnidad. 

Sin renunciar a nuestros principios basados en la máxima expresión de la excelencia, hemos querido presentaros una selección de espacios gastronómicos que esperamos encajen con vuestros gustos y preferencias.

Así pues...

Restaurante Caelis - Hotel Palace
  
Desde hace 16 años el célebre restaurador poseedor de  una Estrella Mechelin, Romain Fornell dirige el Restaurante Caelis, un exclusivo espacio gastronómico situado en una de las salas nobles del lujoso Hotel Palace de Barcelona, el antiguo Ritz.

Pese a que hace casi una década que lo visité por primera vez, su cocina jamás dejará de sorprenderme. Cada plato, cada cucharada o cada bocado van más allá convirtiéndose en toda una experiencia sensorial que activa desde el primer al último de mis cinco sentidos bajo un marco de lujo absoluto, presidido por elegantes lámparas de Philippe Stark para Baccarat , una chimenea de mármol de principios de siglo y butacas tapizadas en piel y terciopelo.  

Partiendo de la base de que cada plato se crea a partir de experiencias, encuentros, recuerdos, sensaciones e ideas, no es de extrañar que sean concebidos como pequeñas obras de arte que pueden llegar a tardar años en realizarse, ya que detrás del proceso mecánico del montaje existe un arduo trabajo de investigación y desarrollo donde se busca en todo momento el equilibrio, cuidando al máximo el detalle hasta llegar a la armonía.

En un restaurante como este el comensal se deleita con un menú degustación donde previamente se le pregunta si sufre algún tipo de intolerancia o alergia hacía algún producto en particular por si debe llevarse a cabo alguna adaptación del plato. Si no desea probar el menú completo pueden también pedirse platos aislados de la carta y hacer un combinado con las distintas opciones que forman los dos menús que ofertan. 

El Caelis es un universo paralelo donde poder desconectar del mundo que nos rodea. Al sentarse, el comensal olvida su cultura, su religión y hasta incluso su identidad dejando la mente completamente en blanco y dejándose llevar a un nuevo mundo de sensaciones de la mano de reconocidos profesionales del sector que día a día aportan un toque fresco y contemporáneo, al mismo tiempo que interactúan con el comensal convirtiéndolo en cómplice. 

Sabiendo mantener viva la tradición del lujo y adaptándola al gusto de hoy, en todo momento se percibe la pasión por su trabajo que desprende todo el personal. Si algo tienen en común todos y cada uno de los miembros que forman parte del equipo de Fornell es su pasión por lo que hacen. 
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Otro detalle que jamás dejará de sorprenderme es como paralelamente se trabaja la vajilla y la cubertería.  

Servido en la carcasa de un erizo de mar de porcelana, el menú da comienzo con la degustación de una Amuse-bouche Caelis, compuesta por turrón de foie, erizo de mar con algas y caviar y pulpito frito al azafrán. 
Bajo el aviso en clave de humor de "Consumir en 5 minutos" en la tapa de la Lata de caviar y buey de mar con esferificación de aguacate “hass” se sirvió el primer plato. 
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Al que le siguió una deliciosa Sopa de foie gras con colmenillas chalota y parmesano reggiano.
A los pocos minutos éramos sorprendidos con esta original Tarta fina de ceps del Montseny con emulsión de ajo y perejil.
Si nunca lo habéis probado os recomendamos el Caneton "à la presse" en dos servicios tanto por su delicioso sabor como por su proceso de elaboración en directo.

En el primer servicio el pato asado es troceado separando la pechuga de los muslos y acto seguido el resto de extremidades son introducidas en una prensa de plata siendo prensadas hasta obtener la esencia del pato. Con el jugo obtenido se emplea como salsa de acompañamiento.

En el segundo servicio el pato es frito en su salsa y acompañado con sésamo y canónigos. 
Empleando como referente de inspiración un restaurante de Estados Unidos donde los camareros elaboraban el plato directamente sobre la mesa, asombrado ante tal espectáculo decidió desarrollar un postre único y especial con el que sorprender a sus comensales.

Tras meses de perfección y búsqueda de los ingredientes más apropiados creó el postre “Explosión St Honoré”  una crème glacée de chocolate, fresa y palomitas caramelizadas con Peta-Zetas, frutos rojos, crema inglesa, crema de chocolate con leche y esferas de oro.

Como si de una recreación de la teoría del Big Bang se tratase, sobre un fondo negro se instala una bola de chocolate rellena de crema de chocolate, crema de fresa, palomitas caramelizadas recubiertas con oro y Peta-Zetas. Una vez instalada se rellena con nitrógeno líquido para que se hiele y adquiera una textura de helado, mientras se emplea el mantel como lienzo en blanco, el camarero dibuja sobre la mesa con chocolate. Como si de una obra de arte materico se tratase, se van añadiendo frutos rojos, frutas escarchadas y otros trozos de frutas. Una vez está todo listo, se alza unos centímetros la bola de chocolate y se deja caer sobre la mesa. El impacto provoca que la bola se rompa en mil pedazos y sus trozos se fundan con el resto de ingredientes que había previamente sobre la mesa. 

Sin lugar a dudas un recomendable espectáculo que todo el el mundo debería presenciar al menos una vez en su vida.
Restaurante ArtTé

Para alguien que lleva toda su vida luchando y trabajando por hacer realidad un sueño, llegar a la meta va más allá de conseguir un logro. Cuando se materializa un deseo, lo anhelado al fin cobra vida en el mundo real dejando de ser tan sólo una fantasía dentro de nuestra mente.

Cuando la actividad profesional que alguien lleva a cabo es al mismo tiempo una pasión, no se trabaja, se disfruta. Al producirse este hecho es cuando transmitimos algo que los demás, sobre todo si estás cara al público, perciben. 

Pese a que a día de hoy muy pocos son los afortunados que pueden acuñar y hacer suya está máxima, Mario Fradera, propietario del Restaurante ArtTé, puede jactarse de ello siendo el precursor de un nuevo modelo de negocio artístico / gastro-cultural donde el arte, la gastronomía y la pasión por el té se dan la mano creando un espacio único y diferente jamás visto hasta el momento en la capital catalana, donde el cuidado de hasta el más mínimo detalle va más allá de una obsesión, convirtiéndose en uno de los pilares de su filosofía. 

En ArtTé la sorpresa es una constante invariable, desde que se traspasa el umbral de la primera puerta todo es posible y puede suceder cualquier cosa. Tomar un té o café de apenas unos minutos se convierte en un ritual, casi mágico, que invita a quedarse y donde el cliente se encuentra en todo momento como en casa.

Siendo plenamente conscientes de lo viva que está una ciudad como Barcelona, la versatilidad de la decoración se adapta a las distintas necesidades que surgen a lo largo del día. A primera hora con cafés y desayunos, al mediodía con las comidas, a partir de la media tarde con actuaciones en directo durante el afterwork o en la noche durante las cenas. Este hecho hace que la noche del próximo 31 de diciembre sea esperada con expectación ya que a partir de las 21h dará comienzo una gran cena de fin de año compuesta por un menú de lujo aderezado con actuaciones en directo después de las campanadas y barra libre durante la cena. Para aquellos que prefieran unirse más tarde, a partir de las 01:30h podrán acceder a ArtTé y disfrutar de un concierto con consumición incluida. 

Nuestro menú degustación da comienzo descubriendo otra de las opciones que ofrece la rica oferta del local, la alta coctelería. Los combinados, con y sin alcohol, que elaboran sus bartenders van más allá convirtiendo su elaboración en directo en todo un espectáculo. 

Siendo los primeros en sumarnos a la experiencia #UmamiArtte de la mano de Ilan Arca, fuimos deleitados con el cóctel estrella que presentará Pablo Pelatti al concurso internacional #WorldClass2016, el Umami, el quinto sabor, ese gran desconocido en occidente y cuya traducción literal seria “sabroso”. Se trata de una fusión de whisky ahumado y sake con notas de chocolate, especias y cítricos asiáticos. Además de lo delicioso que es este cóctel, la realización del mismo es todo un ritual, para la mente, el espíritu y paladar. Este ritual stá formado por los siguientes pasos:

Iniciamos el ritual con una cata de dos tés negros que nos darán dos de las notas, dulce y ahumada, en las que se basa este cóctel:


-Travel to India: un té negro blend especiado masala, con vainilla, jalea real, clavo y jengibre

-Lapsang Souchong: con hojas secadas sobre madera ahumada de pino, que le da su aroma característico.
Se sumarán los toques del té Irish Chocolate, con pequeños trozos de cacao y de chocolate con frutos secos.

Para dar paso a degustar Umami, una mezcla de contrastes difícil de describir, con un sabor sutil y prolongado que deja una sensación aterciopelada en el paladar. Gracias a uno de los protagonistas, el Talisker Single Malt de 10 años. Ha sido escogido por sus marcadas notas de vainilla, cítricos, especias como la pimienta y su final dulzón. Y por supuesto, cuenta con algunos ingredientes más que no os vamos a desvelar para que os sorprenda como a nosotros. 
Tras el espectáculo, contando con Mario Fradera como maître de lujo dimos paso a probar alguno de los platos más destacados de la carta. 

Partiendo de la base de que emplean productos de primerísima calidad, lo primero que se percibe es el predominio del sabor de los ingredientes sin aderezo adicional alguno.

Como entrantes os recomendamos la ensalada de tártar de tomate con dátiles sobre un lecho de quinoa y como plato principal el meloso de cordero con boniato a su jugo al Earl Grey.
A modo de entrante el aguacate con pulpo asado con algas, ají, soja y rábano picante con emulsión de espirulina os puede resultar una sana opción. 
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Como si del ritual de la ceremonia del té se tratase cada plato es un poema visual en si mismo. Prueba de ello es este plato elaborado con foie, caballa y un lecho de brotes con caldo.

Sus postres son alegorías visuales en estado puro por ello es mejor que los descubráis por vosotros mismos.

De su extensa carta de cócteles, nos llamaron la atención el "Coco Chanel" y el "Mensaje en una botella"

Si buscáis una opción diferente, sana y a la vez hiper sofisticada sin pretensiones ArtTé es vuestro restaurante para pasar este fin de año.

Restaurante Índigo - Hotel Hilton Diagonal Mar

Tras el éxito cosechado este verano con la Terraza Puro Beach, el Hotel Hilton Diagonal Mar de Barcelona continúa su oferte gastronómica con el Restaurante Índigo, un punto de referencia de la alta cocina catalana, capitaneado bajo la atenta mirada del célebre restaurador Pedro Corredor.

Empleando el tesón, la constancia y la vanguardia como carta de presentación de la mano de Té Dilmah se ha creado un completo menú degustación maridado con té.
Como entrante os recomendamos este meloso jabalí de carne ecológica con arroz y setas. El intenso sabor de la carne contrasta en armonía con la sutileza de las setas.
Cuando la crema de galeras ligera al aroma de la manzanilla es servido se convierte en todo un ritual. Lo que más llama la atención es que es servido en una tetera de porcelana.

Al impregnarse con esta salsa los langostinos en tempura que acompañan al plato su rebozado se convierte en toda una nueva experiencia sensorial.
El lomo de bacalao confitado a baja temperatura con puré de boniato, apio salteado y aire de té negro sorprende por su contraste cromático.
Los más golosos estarán de suerte disfrutando de una amplia selección de pasteles veganos de chocolate, zanahoria y naranja amarga, algunos de ellos, elaborados con té verde.

Aquellos que prefieran dejarse llevar no deberían dudar en probar el cremoso de mandarina en sus tres textura con chocolate blanco. Quedaréis encantados.
Restaurante El Principal

Ubicado en lo que en su día fuese la planta noble de una regia finca modernista del Ensanche Izquierdo barcelonés, el Restaurante El Principal se ha convertido en un espacio gastronómico de lujo donde el tiempo se detiene y donde el comer se convierte en una experiencia única e irrepetible. 

Alta cocina sin pretensiones con una acertada relación calidad precio que se ciñe a los productos de temporada y donde bocado a bocado se saborea y percibe el esmero y la dedicación cuyos chefs emplean a la hora de preparar cada plato.  

Su elegante y cuidada decoración apoya y refuerza su concepto de alta cocina contando con espacios únicos y de ensueño donde trasladarse al esplendor de una época pretérita sin renunciar a las comodidades de nuestro tiempo.

Para aquellos que busquen la paz dentro de la vorágine de su día a día, recomendarles la terraza, un mágico jardín cuya vegetación aísla por completo de todo estímulo superfluo o innecesario. Si lo que buscáis es un poco más de intimidad su biblioteca será el lugar que estáis buscando, arropados por el cálido fuego de su chimenea podréis hacer de vuestra velado un bonito recuerdo que jamás olvidar.    
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Restaurante Cachitos Rambla

¿Quién no conoce los Restaurantes Cachitos de Barcelona? Si tú eres uno de ellos y aún no te has dejado seducir por el embrujo de su cocina, reserva mesa en breve y ves acompañado por alguien muy especial. 

Su decoración de ensueño obra de Estrella Salietti, os trasladará a un universo paralelo donde tan sólo vosotros seréis los protagonistas. 

Lejos de querer ser un restaurante más de cocina de mercado, su amplia carta abarca todo tipo de platos y recetas dando lugar a cartas especializadas que cada temporada se renuevan dando paso a nuevas y sorprendentes propuestas.

Contando con cartas de carnes, setas, arroces y pescados su oferta va más allá contando con una carta con más de 50 tipos de sangrías. La más famosa y demandada es la elaborada con Moët & Chandon, una efectista elección que sorprende tanto por su puesta en escena como por sus matices. 
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Restaurante The Market

Poniendo el broche de oro al céntrico y exclusivo Paseo de Gracia barcelonés, justo delante de la obra póstuma del célebre arquitecto catalán Domènech i Muntaner se encuentra el Restaurante The Market, un lugar cuya alta cocina, típica peruana, te traslada a la cima del Machu Picchu sin prácticamente salir de casa. 

Su chef ejecutivo Nicky Ramos, nombrado Embajador gastronómico por el Gobierno de Perú en la Ciudad Condal, convierte todo lo que toca en verdaderas obras de arte. Sus platos lejos de ser un calco de la tradición de sus ancestros, huyen de lo convencional y son reinventados bocado a bocado sin perder la esencia de su base cultural sabiéndose adaptar con mucho acierto a los gustos del comensal local. 

Si os decantáis por esta original opción no olvidéis pedir su deliciosa y preciosista causa limeña y su sabroso ají de gallina con huevos de codorniz. Quien avisa... no es traidor. 
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Restaurante Abrassame

Poniendo como testigo a la Montaña Mágica de Mont Juïc el Restaurante Abrassame de la Cúpula del Centro Comercial Las Arenas cuenta con una de las vistas más privilegiadas y codiciadas de la Ciudad Condal

Su decoración, fruto del buen gusto de sus propietarios, combina muy sabiamente piezas clave de diseñadores de renombre internacional de la talla de Philippe Stark con piezas icónicas del diseño típico catalán.

La carta cuenta con un sinfín de suculentas referencias de todo tipo, haciendo hincapié en las brasas, origen de donde proviene el nombre del restaurante. A título personal quiero recomendaros sus carnes y arroces. Si el tiempo acompaña no olvidéis tomar el postre fuera en su espléndida terraza. 
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Restaurante Organics

Concienciados con los cada vez más adeptos que se suman día a día a la saludable comida ecológica nació hace dos años Organics, un restaurante 100% bio y 100% ecológico en cuya carta no encontrarás nada con colorantes o conservantes ya que todos sus platos son frescos del día y elaborados con productos kilómetro cero.

Si te pica la curiosidad y no sabes que pedir podrás ver que ofertan platos de todo tipo, carnes, ensaladas y hasta incluso originales fiambreras con sushi vegetariano, la última incorporación de la carta. 

Todos y cada uno de sus vinos son también ecológicos, hasta los refrescos. Pese a que cada día van cambiando, sus postres son una delicia, además saber que estás tomando un postre sin azúcares añadidos es todo un lujo a tener en cuenta en una sociedad de consumo como la nuestra.
Restaurante Miss Sushi Aribau

De un extremo al otro nos trasladamos al Gayxample de Barcelona para descubriros la nueva carta del Restaurante Miss Sushi Aribau, un restaurante especializado en sushi de diseño. 

La cuidada estética del local harmoniza con cada uno de los platos, la vajilla, el mobiliario, las lámparas e incluso hasta con la iluminación de ese momento. 

La original puesta en escena de sus presentaciones lo convierten en un lugar que jamás pasará de moda ya que las referencias de su carta se basan en las tendencias imperantes en la moda del momento. 

Lejos de ofrecer el clásico y tradicional sushi al que todos estamos acostumbrados van más allá ofreciendo postres de ensueño como su popular "Tiramisuhi", un must have en toda regla que no podéis olvidar probar esta temporada. 
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El Matos Bar de Vins & Enoteca

En la céntrica calle Muntaner del elitista barrio de Sant Gervasi encontramos El Matos una de las vinotecas más prestigiosas y de mayor renombre de nuestro país. 

Su propietario, un apasionado del universo del vino, supo analizar con mucho acierto las carencias de esta segmentación de mercado sabiendo dar una respuesta a una necesidad en este mercado a través de un exclusivo espacio donde la calidad premia ante todo.

El éxito de su fórmula reside en el trato directo con las bodegas, hecho que les permiten disponer de más de 300 referencias con precios aptos para todos los bolsillos, ya que oscilan entre los 4€ y los 200€. ¿Quién dijo que beber un buen vino era un lujo reservado a tan sólo unos pocos? Pues bien, ya tenemos excusa para darnos un pequeño homenaje descorchando una buena botella.   

Si sois de ese tipo de personas que os apasiona más un buen vino que un copioso ágape culinario, reservando cita con tiempo podréis llevar a cabo una completa cata maridada con los mejores productos de la tierra. 
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Restaurante Els 4 Gats

¿Os imagináis un viaje en el tiempo en el que os convertiríais en coetáneos de destacadas personalidades de la talla de Salvador Dalí o Pablo Picasso

¿Y si os digo que es posible y que tan sólo se encuentra a cinco minutos caminando por el concurrido Portal del Ángel qué me diríais?    

El Restaurante Els 4 Gats, es más que un espacio de estilo neogótico obra de Domènech i Muntaner, donde disfrutar de una buena cocina, se trata de un pedazo de la historia de la cultura de Barcelona que durante décadas ha sido el punto de encuentro por antonomasia de la élite artística e intelectual de nuestro país. Con estas referencias ¿A quién no le apetece impregnarse con la historia de una de las naciones más ricas y completas del mundo? 

La magia y carisma que desprende la Casa Martí ha llegado a cautivar los corazones de cineastas de prestigio de la talla de Woody Allen que convirtió el salón principal en uno de los escenarios de uno de sus filmes "Vicky, Cristina, Barcelona" protagonizada por Penélope Cruz y Scarlet Johanson.  

Cada rincón cuenta con una historia detrás. Con el objetivo de querer mantener vivo este bullicioso y activo espíritu que siempre lo ha caracterizado han querido organizar un fin de año muy especial repleto de sorpresas que los asistentes jamás olvidarán. 

Si buscáis una céntrica opción que os permita llevar a cabo una completa ruta después de cenar, una de las noches más mágicas del año, sin duda Els 4 Gats es vuestra opción. 

Su completa y variada carta se amplía estos días ofreciendo menús exclusivos tanto para Navidad como para fin de año. Este último lejos de ofrecer un típico menú catalán, apuestan por la innovación llevando a cabo un fantástico viaje gastronómico a través de las distintas cocinas del mundo amenizados con una banda de música en directo. ¿Qué más se puede pedir?

Ya seas un habitual o bien tan sólo estés de paso, su director Rafael Javier hace todo lo posible que esté en su mano para que tu visita se convierta en una mágica experiencia que lleves siempre contigo en el recuerdo. A día de hoy cuesta encontrar a personas capaces de transmitir la pasión por su trabajo, por ello desde aquí queremos felicitar su labor y premiarle con estas líneas en homenaje a su persona. 
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Restaurante El Cafè de Víctor

Porque no todos pueden presumir de ello, más de  30 años abalan ya el secreto de su éxito.  El Cafè de Víctor se ha convertido en un punto de encuentro donde lo más bohemio de la zona se da cita con insaciables y exigentes turistas de paso que lejos de encontrar una cocina sofisticada y con pretensiones, caminan en búsqueda de lo esencial. 

La sensibilidad de su cheff ejecutivo le lleva a combinar productos como el caviar, el foie o las flores de pensamiento con ingredientes más de calle obteniendo como resultado interesantes presentaciones que convierten en aún más apetitosos sus platos.
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Restaurante Fritz

Si lejos de postureo alguno lo que buscáis es simplemente disfrutar de una sana y sabrosa cocina con fundamento junto a vuestros seres queridos en una fecha tan señalada, el Restaurante Fritz será vuestra elección.

En su cocina sólo hay cabida para ingredientes de primerísima calidad y su equipo de cocineros lo dan todo para que una simple hamburguesa sepa y luzca como el mejor de los filetes de carne de kobe

Empleando el cariño, el mimo y la pasión por un trabajo bien hecho como base de su filosofía en la cocina, El Fritz lleva años siendo todo un referente de la zona alta en cuanto a buen trato y calidad se refiere. 

Su hamburguesa con salsa París transporta a la adolescencia de todo aquel que la prueba. Bocado a bocado cada uno de los platos te hacen rememorar entrañables instantes de tu vida en muchas ocasiones ya olvidados. Si buscáis un lugar donde vuestro fin de año sea como en casa os encantará. 
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